1 DE DICIEMBRE, DÍA MUNDIAL DE LA LUCHA CONTRA EL SIDA
Más de 300 mil mujeres embarazadas seropositivas no acceden a medicamentos antirretrovíricos, que previenen la transmisión maternoinfantil. En Argentina, FUNDAMIND desarrolla hace 26 años tareas de prevención y atención fundamentales para atenuar el impacto del VIH en la primera infancia.
ONUSIDA dio a conocer que el año pasado más de 300 mil mujeres embarazadas seropositivas no pudieron acceder a medicamentos antirretrovíricos que previenen la transmisión maternoinfantil. Además, en los últimos cinco años hubo 1,9 millones de nuevas infecciones anuales en adultos.
En base a ese y otros datos, En septiembre de este año y de cara al 1 de diciembre, la oficina de Naciones Unidas encargada de delinear acciones globales para erradicar el SIDA lanzó una campaña de difusión sobre las circunstancias clave que rodean a la problemática.
Si bien el tema parece menos dramático que al comienzo del milenio, en todo el globo hay aún más de 36 millones de personas afectadas, mayormente concentradas en África, Asia y Latinoamérica. Otro dato que sigue preocupando es que casi la mitad no conoce su condición de infectada.
Este escenario complica las intenciones de poner fin a la epidemia para el 2030, tal cual quedó establecido en los Compromisos de Acción Acelerada que tomaron gobiernos y sociedad civil bajo el paraguas de esa oficina de la ONU.
Se trata de una serie de consensos para poner fin al sida que guían la estrategia consensuada en la 37ª reunión de la Junta de Coordinación del ONUSIDA, en busca de poner fin a la epidemia de sida en cuanto amenaza para la salud pública para el 2030.
En ese marco, la estrategia para 2016-2021 es una de las primeras del sistema de las Naciones Unidas que se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que establecen el marco de la política de desarrollo mundial para los próximos 15 años, y entre los que se incluye poner fin a la epidemia de sida para el 2030.
Según se dio a conocer, se espera que en cuatro años haya menos de 500 mil infecciones nuevas y menos de 500 mil muertes anuales relacionadas con el sida. Otro de los aspectos fundamentales está relacionado con eliminar todo vestigio de discriminación contra las personas portadoras del virus.
En el caso de niños y niñas, en la Argentina se registran casi 5 mil con el virus desde la aparición de la epidemia, en 1981. Es una población vulnerable sobre todo en familias con escasez de recursos económicos y culturales, en situación de pobreza y riesgo social.
En FUNDAMIND son atendidos unos 200 chicos de familias en esas condiciones, que están conformadas mayormente por mujeres solas con sus hijos, a quienes se les da contención, educación y alimentación en el Centro de Primera Infancia ubicado en el barrio de Balvanera mientras que a las madres y a otras personas interesadas se les realiza de forma gratuita el test de VIH.
La consigna #NoMásChicosConSida es parte de la estrategia de varios programas de la fundación, que recorrió el país con un móvil de prevención y realiza varias actividades anuales de gran impacto para sensibilizar sobre el tema y recaudar fondos que contribuyan a solventar estos programas.
Uno de esos eventos tendrá lugar este lunes 5 de diciembre en el barco Mississipi River, anclado en Puerto Madero. Allí FUNDAMIND organiza el Fashion&Art, que contará con un desfile de alta costura de Roberto Piazza y de Taglio Trajes, además de un cierre musical a cargo de Daniel Agostini.
A nivel mundial se estima que el número de niños y niñas que nacen con VIH bajó a casi la mitad -de 400.000 a 240.000- entre 2009 y 2013. De todos modos, en Latinoamérica y el Caribe, los últimos datos indican que hay aún unos 46 mil niños y niñas viven con VIH. El número se disparó en la región a inicios de los noventa, hasta entrado el nuevo siglo, cuando empezó a decaer lentamente.
Los chicos pueden adquirirlo en el período perinatal (embarazo, parto y lactancia); infectarse por vía sexual en la adolescencia; y tener familiares seropositivos imposibilitados de brindar a los niños los cuidados que requieren, por estar ocupados en su propia sobrevivencia. En Argentina hay, además de los 5 mil infectados, otra cantidad similar que han quedado huérfanos antes de los 15 años a causa del Sida.
Para varias organizaciones como FUNDAMIND evitar la transmisión vertical -de madre a hijo- es una prioridad y, en ese sentido, hace tiempo viene trabajando para que haya políticas en ese sentido desde el Ministerio de Salud de la Nación, en cuya órbita existe una dirección nacional específica para trabajar sobre el Sida y otras enfermedades de transmisión sexual.
Levantemos las Manos por la #prevenciónVIH
La campaña propuesta por ONUSIDA para este año lleva la consigna Levantemos las Manos por la #prevenciónVIH y apunta a explorar diferentes aspectos de la prevención del VIH y cómo afectan a determinados grupos como adolescentes y mujeres jóvenes, las poblaciones clave y las personas que viven con el VIH.
Se invita, por un lado, a tomar una fotografía de una palabra o una frase corta escrita en la palma de la mano que resuma las necesidades para fortalecer los esfuerzos de prevención. Por otro, a producir un mensaje de vídeo -de un máximo de 30 segundos, que puede ser grabado con un teléfono y compartido en Facebook- que explique qué se considera útil para reducir las nuevas infecciones por el VIH en cada comunidad. El objetivo es abrir un espacio para que las personas expresen sus puntos de vista sobre lo que creen que hay que hacer para fortalecer estos esfuerzos.
⇒ Para compartir el video se puede subir en la página del evento en Facebook World AIDS Day 2016
⇒ Otros materiales, como carteles y postales, pueden descargarse en www.unaids.org
Proyecto de Ley
La Dirección Nacional de Sida y Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS) del Ministerio de Salud de la Nación, con la colaboración de unas 40 organizaciones de la sociedad civil, ingresó semanas atrás en la Cámara de Diputados un proyecto para reformar la actual ley, vigente desde 1990.
Posible “cura completa”
El VIH desapareció de la sangre de un británico de 44 años que estaba infectado, luego de ser sometido a una terapia diseñada por científicos de cinco universidades del Reino Unido, en lo que sería “uno de los primeros intentos serios de cura completa” de esta enfermedad.